Está claro que quién mas o quien menos entiende a grandes rasgos lo que es Internet, pero algunos detalles como su origen, evolución, composición y funcionamiento es algo un poco más desconocido para la mayoría. Esa es mi misión de hoy, explicarte algunos aspectos generales importantes sobre este mundo virtual en el que nos sumergimos en muchísimas ocasiones a lo largo del día.

Es común confundir Internet con la Web, pero no son lo mismo. Lo que sería correcto es decir que Internet es imprescindible para poder navegar por las diferentes páginas webs, pero además, también se utiliza para muchos otros servicios y recursos, como transmisión del correo electrónico, intercambio de archivos, mensajería instantánea o videojuegos en línea, por mencionar lo más común.
Podría hacerse un símil de Internet como un planeta con los requisitos necesarios para que se produzca vida en él, clima apropiado, atmósfera respirable, recursos suficientes, terrenos estables… Y todos los seres que se aprovechan de estas idóneas condiciones, serían los servicios de Internet que utilizamos sus usuarios.
Ahora te lo voy a expresar de una forma un poco más técnica, pero tan solo un poco: Internet es un sistema de diferentes aparatos interconectados a lo largo de todo el mundo, estos se comunican de forma simultánea mediante sistema conocido como protocolo TCP/IP.
Explicándolo de forma muy resumida, la información que utilizas en Internet se divide en pequeños paquetes de datos que se transmiten a través de cable u ondas electromagnéticas entre nuestros dispositivos digitales y unos ordenadores llamados Servidores donde se almacenan el grueso de la información. Para poder localizar a los unos y los otros en Internet, se les asigna un código único que los identifique (dirección IP), compuesto por una serie de cuatro números separados por puntos, como por ejemplo 192.168.1.10.
Tipos de conexión a Internet
Como te decía, la infraestructura de Internet se cimienta en una interconexión de dispositivos, que permiten que podamos usar sus servicios a través de ordenadores, móviles, tablets, cajeros automáticos, etc… En la actualidad para conectarte a Internet puedes optar por tres medios:

- La tradicional línea telefónica. En los comienzos de Internet, era el único sistema para que el ciudadano de a pie pudiera acceder a ella. Con el tiempo fue mejorando y aumentando su volumen de transmisión de datos con las famosas ADSL de la época, pero en la actualidad cada vez se encuentran en mayor desuso.
- La fibra óptica. Es un cable de plástico relleno por manojos de hilos transparentes tan finos como el pelo. A través de ella circulan haces de luz en los que previamente se han convertido los datos que enviamos o recibimos en nuestros dispositivos. La altísima velocidad de transmisión de la fibra óptica la convierten en la mejor opción para conectarse a Internet desde establecimientos y viviendas.
- La conexión por redes vía satélite. Es la que utilizamos en los dispositivos móviles, se basa en la propagación por el aire de ondas electromagnéticas, aunque todavía son algo más lentas que la fibra, tienen la gran ventaja de la independencia de un lugar físico concreto para la conexión a Internet.
Cualquiera de estos medios de transmisión los tenemos que contratar a través de una compañía especializada. En el caso de la conexión por cable telefónico o fibra, además tendrán que suministrarnos un módem que convierte el tipo de datos de nuestros dispositivos, en la clase de señal que se transmite por el cable, y viceversa. Por lo tanto, para utilizar los servicios de Internet tendremos que conectarnos al Módem, por cable o por conexión inalámbrica (WIFI). El Router es el aparato que nos permite conectar más de un dispositivo al Módem y por lo tanto a Internet. En la actualidad, lo más común es que las compañías nos proporcionen un “módem-router”, dos aparatos en uno.
Usos comunes de Internet
Las posibilidades que brinda Internet como fuente de acceso a información y recursos en sus múltiples formatos son casi ilimitadas. Por esto, en las últimas décadas, los servicios de comunicación tradicionales se han visto obligados a ofrecer plataformas y aplicaciones WEB para adaptarse a las nuevas demandas.
La información de Internet se presenta como texto, sonido, vídeo e imágenes. De la combinación de estos elementos surgen diferentes medios y plataformas que integran infinidad de tipos de contenidos:
Navegación por Internet: Es la utilidad más común de Internet, por medio de esos programas llamados navegadores podemos ir saltando de enlace en enlace por la inmensidad que componen el conjunto de millones de sitios y aplicaciones WEBs.
Correo electrónico, tradicional forma de comunicación digital que aún se mantiene vigente.
Aplicaciones WEB, son herramientas a las que accedemos a través de internet y no necesitamos tener instaladas en nuestro equipo.
Redes sociales, consisten en infraestructuras compuestas por usuarios que se relacionan entre sí por algún criterio común, como puede ser intereses, organizaciones, empresas…
Servicios en la nube, principalmente de almacenamiento de datos evitando así el consumo de recursos de nuestros equipos.
Mensajería instantánea, se trata de programas de comunicación directa por medio de texto, audio y/o vídeo entre dos o más personas.
La Banca electrónica , incorpora prácticamente todos los servicios del sistema financiero sin necesidad de desplazarnos a una oficina bancaria.
Servicios de streaming, transmisión a la carta de contenido multimedia, en algunos casos interactivos, como videos, películas, series o videojuegos.
Enseñanza virtual, permite a los alumnos participar en un entorno digital y llevar a cabo su formación en cualquier materia, sin importar la localización de los mismos ni su horario disponible. Con el tiempo ha ido tomando peso dentro de Internet pero desde la pandemia por COVID se hace casi imprescindible en diferentes áreas de la educación.
Comercio electrónico, compra y venta de servicios o productos físicos o virtuales minuciosamente detallados dentro de las plataformas dedicadas a ello.
Cronología histórica de Internet
Conclusión sobre Internet
En la actualidad un altísimo porcentaje de personas del mundo se conecta a Internet asíduamente. Nos permite infinidad de usos, desde escribir un clásico correo electrónico hasta entrar en un mundo de realidad virtual junto a otros internautas. Su avance es imparable y sus posibilidades ilimitadas.
La intimidad de las personas junto con su anonimato son cada vez más difíciles de mantener desde el momento en el que la humanidad decide apostar al máximo por las inmensas ventajas que nos ofrece Internet. Es algo que no nos queda más remedio que asumir para poder adaptarnos al moderno mundo que nos rodea.

En realidad a mi me preocupa mucho más, el uso excesivo de esta tecnología. Puedo constatar en primera persona, que en muchas ocasiones me sumerjo en Internet por inercia, sobre todo desde el móvil, sin tener muy claro porque ni para que. Es evidente que, a veces Internet, pasa de ser una herramienta muy útil a una vía de escape ante el aburrimiento o cualquier otro tipo de malestar. De acuerdo con algunos psicólogos especializados, se puede decir que, aunque el abuso del Internet no es considerado como una adicción tiene características similares a las que influyen en una persona enganchada.
No obstante, teniendo en cuenta el mundo en el que nos movemos, renunciar al potencial que nos puede aportar Internet, nos convierte en personas obsoletas tanto en el campo laboral como en el terreno cotidiano. Por lo que te animo a que, de forma adecuada, explores todo lo que te puede ofrecer uno de los grandes inventos del siglo XX, porque la realidad es que existen formas muy beneficiosas de utilizar Internet, en cualquier caso si sientes en algún momento que está fuera de tu control, aparca un rato el mundo virtual, sal a que te de el sol y toma contacto real con los seres que habitan el planeta tierra.
Buen artículo. Me ha gustado mucho la parte de la cronología y que incluyas tus propias experiencias personales. Enhorabuena.
Gracias por el comentario Jesús.